Un estudio para la Xunta plantea la fusión de Sanxenxo y Meaño

Cruce en Meaño de la Autovía do Salnés. GSV

Otra de las propuestas pasa por agrupar los municipios de Deza

La última fusión de concellos en Galicia data de 2016 y fue la que unió en Pontevedra a los municipios de Cerdedo y Cotobade.

Ocho años después, el debate sigue vivo y este jueves la Xunta organiza el congreso Reforma del mapa municipal de Galicia, en el que presentará el informe Estudio sobre la planta local gallega, realizado por la fundación Juana de Vega en colaboración con la tres universidades gallegas.

En él se aborda la reforma del mapa municipal de la comunidad y el impulso de nuevos procesos de fusión municipal, además de otras fórmulas de cooperación intermunicipal. A pesar de que el estudio se hará público el jueves, el medio digital Praza.gal publicaba este domingo que en él se barajan siete fusiones en todo el territorio.

En la provincia de Pontevedra hay dos sobre la mesa. En el caso de la comarca de Deza se barajan dos opciones. Unir los seis municipios que la conforman: Agolada, Dozón, Lalín, Rodeiro, Silleda y Vila de Cruces para crear un concello de cerca de 40.000 habitantes, o bien fusionar únicamente Lalín, Rodeiro y Dozón quedándose en algo más de 23.000.

El informe también la de Sanxenxo y Meaño, que superarían los 23.000 habitantes.

El estudio se hará público el jueves

El estudio que se hará público el jueves e incluye, además de la lucense, otras seis posibles fusiones, analiza los procesos de unión municipal desde la perspectiva económica, así como otras alternativas particularmente de las mancomunidades intermunicipales, de las áreas metropolitanas y de los consorcios. El trabajo se completó con el análisis de las experiencias de Oza-Cesuras, en A Coruña, y Cerdedo-Cotobade, en Pontevedra.

En paralelo, también se entrevistó a profesionales de distintas áreas y se encuestó a un millar de gallegos. Según indicaron desde la fundación Juana de Vega, las primeras conclusiones mostraron que la ciudadanía tiene una predisposición favorable a la fusión voluntaria de los ayuntamientos (un 83%) y considera que la reducción del número de estos mejoraría su capacidad de prestar servicios.

El estudio finaliza con una serie de propuestas orientadas a incentivar los procesos de remodelación para aumentar el tamaño de los municipios, fundamentalmente centradas en la realización de reformas legislativas que faciliten los procesos de agregación, mejorar los incentivos financieros y fiscales y generar conocimiento técnico y científico para dotar de rigor el debate alrededor de las fusiones municipales, entre otras.