La acción del mar continúa imbatible en la playa de A Carabuxeira cuyo entorno, ya de por si bastante castigado, acaba de lanzar otra señal de alerta. La exposición a los temporales del invierno y las fuertes lluvias de las últimas semanas han hecho mella en la estructura de una vivienda ubicada en pleno arenal, cuyo muro exterior se ha derrumbado parcialmente por uno de sus laterales, con la consiguiente caída de piedras y otros materiales hacia la playa que, aunque todavía no ha llegado la temporada alta del turismo, es uno de los arenales urbanos de Sanxenxo que convive con varias viviendas alrededor.
Según explicaron desde el Concello, el muro que contenía la tierra que conformaba la parcela anexa del inmueble afectado había ido cediendo progresivamente durante los temporales del invierno, y ahora la situación ha llegado a un punto de mayor peligrosidad, puesto que el muro parcialmente derrumbado no solamente sostiene el jardín frontal de la vivienda, sino también una edificación que sus propietarios utilizan como almacén o garaje.
Ante esta situación, el propio alcalde de Sanxenxo, Telmo Martín, así como el edil de Medio Ambiente, Yago Torres, acudieron a la zona durante la mañana de este martes tras recibir el aviso, acompañados por un técnico municipal y la Policía Local para comunicar a la dueña del inmueble la peligrosidad del estado de su propiedad, cuyos accesos fueron inmediatamente precintados por motivos de seguridad por el servicio de Emerxencias, ante la orden del Gobierno local. El alcalde, además, también puso la situación en conocimiento de Costas de Pontevedra.
Por su parte, la plataforma vecinal A Carabuxeira Xa!, que integran varios vecinos y vecinas cuyas viviendas o accesos se ven afectados por el estado de la zona, y que piden la regeneración definitiva de la playa y su entorno, advirtieron de que, cada vez, el deterioro es más evidente. Así, tanto el mal estado de un acceso que linda con otra de las casas, con numerosos desprendimientos, baches y verdín, como el peligro de desprendimiento del último escalón de piedra que forma parte de la escalinata que va directamente a la arena, ponen en jaque la vida diaria y la seguridad de las personas. "De tanto bater o mar están pasando as cousas que pasan, e a vida das persoas pode correr perigo", aseguró la presidenta del colectivo y vecina, Elisa Castaño.
En lo que respecta al inmueble afectado por el desprendimiento del muro, señalaron desde el colectivo, se hace necesario un mayor mantenimiento, si bien, recordaron, en su momento, "nesa zona da praia non se botou area cando se rechearon os primeiros 10.000 metros cúbicos e non entendemos por que". En este sentido, el estado de la playa "outra vez coas pedras á vista", acelera el deterioro de los inmuebles. "Isto parece unha tomadura de pelo. Hai unha desidia total por parte das tres institucións implicadas, Concello, Portos e Costas. Estamos como hai 25 anos. Os veciños e veciñas estamos desesperados", manifestó Castaño, urgiendo a la dotación de elementos como un pasamanos y a la mejora de los espacios de uso público deteriorados, así como a la regeneración definitiva de la playa y su vecina Lavapanos.
Futuras actuaciones: Un proyecto activo desde 2018
El Concello de Sanxenxo recordó este martes que lleva tramitando desde el 2018 en Costas la recuperación de la fachada marítima de esta zona del litoral en la que está previsto instalar una pasarela que permita el acceso público y comunique la playa de A Carabuxeira, Lavapanos y Panadeira. Así, en el último informe emitido por Costas se refleja que actualmente tan solo sería posible la instalación de un paseo de tipo desmontable o de carácter fijo en servidumbre de tránsito que ahora mismo está ocupada por diversos cierres y edificaciones a lo largo de seis metros de la servidumbre de tránsito, por lo que si se decide hacer un paseo fijo tendrá que ser mediante cesiones voluntarias o expropiaciones.
Dicho proyecto se incluye dentro de la recuperación del arenal junto con otras dos actuaciones, como son la construcción de un espigón-rampa perpendicular a la playa (uniendo las rocas existentes) de casi 100 m por 2,34 m de ancho, para evitar la pérdida de arena, así como la aportación de 17.000 m3 de árido procedentes del entorno de la actuación que se suman a los 10.000 m3 depositados en mayo de 2021 y 3.000 m3 más en Lavapanos.
Estas actuaciones requieren, según el Gobierno local, una larga tramitación que, entre otros, incluye una evaluación ambiental y la solicitud ante el Servicio Provincial de Costas de los títulos de ocupación necesarios para realizar las tres acciones previstas.
