Los aledaños de la plaza de abastos de Vilagarcía, en concreto los correspondientes a las fachadas Este y Sur, recuperan la normalidad desde este miércoles tras la finalización de las obras de reforma y mejora de accesibilidad llevadas a cabo en el lugar.
Los trabajos consistieron en retirar las losetas de piedra que estaban en mal estado y reordenar el suelo combinando la piedra con el hormigón de manera que se faciliten las maniobras de los profesionales de la plaza y durante los dos mercados semanales. Se aprovechó también para revisar y mejorar la red de saneamiento. Tras la intervención, la zona vuelve a tener un tráfico restringido, que se limita a los profesionales y los servicios de emergencias, y solo puntualmente a los padres y madres que van a recoger a sus hijos al colegio filipense.
La inversión, de 28.000 euros, forma parte de un plan de mejora de los mercados locales que en el caso concreto de Vilagarcía incluye la reciente instalación de placas fotovoltaicas y de un punto de recargo de coches eléctricos, público y gratuito durante los próximos meses. Actuaciones que se complementarán en breve con un coche eléctrico para el reparto de las mercancías que se venden en la plaza, las taquillas inteligentes para facilitar las compras, las pantallas informativas o las reformas en el interior de la plaza de la verdura, todo en proceso de licitación y a punto de ser adjudicado.
