Galicia tiene una oportunidad para ponerse a la cabeza de la industria y es ahora. En esta premisa coincidieron ayer el promotor del Encontro de A Toxa y presidente del Consejo Rector de Cesuga, Venancio Salcines, y el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, quienes apelaron a un aprovechamiento efectivo de los recursos del territorio que reviertan directamente en la economía empresarial gallega.
Rueda no dudó en afirmar que, "efectivamente, estamos ante una oportunidad que no se volverá a repetir y mucha gente está esperando a que tengamos esos miedos o recelos. Algunos están esperando y otros disimulando. Los de siempre van a decir que no, para después decir que dejamos pasar oportunidades", manifestó, en referencia a los diferentes proyectos relacionados con las energías renovables, la minería o las fibras textiles que, explicó, de no hacerse en Galicia cuando se "ajustan a la ley", se "harán en otros territorios".
En esta línea, Salcines afirmó que actualmente "Galicia supera en renta per cápita a la mitad del país" y que esto "lo hemos hecho trabajando de modo individual. Ahora estamos de nuevo en un momento de cambio, con nuevas líneas estratégicas en las que hay que redefinir las cadenas de suministro, las nuevas tecnológicas y la inteligencia artificial. Esto significa que en estos momentos se están volviendo a repartir las cartas de la economía y hoy tenemos baza ganadora", afirmó, advirtiendo que diferentes proyectos que, en su opinión, colocarían al territorio gallego en una posición económicamente privilegiada a nivel empresarial, podrían quedarse fuera de la comunidad autónoma "por presiones políticas interesadas".
En este sentido, el presidente de la Xunta quiso "comprometer la voluntad de mi Gobierno" a hacer posible la materialización de este tipo de proyectos. "Lo que es bueno para muchos sitios tiene que ser para Galicia, porque tenemos el talante y las condiciones", aseguró.
CIERRE DEL 'ENCONTRO'. La jornada de ayer puso el punto y final a la cuarta edición del Encontro que se celebra en A Toxa, por cuya tarima pasaron diferentes entidades y representantes políticos como la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana, quien aseguró que "recualificar a las personas para que puedan adaptarse a los nuevos procesos tecnológicos" es uno de los retos a afrontar bajo el paraguas de la colaboración público-privada, junto a la internacionalización y la fijación del talento en Galicia. A su vez, representantes de entidades como Ence o Estrella Galicia afirmaron que la "inteligencia artificial supone una oportunidad" a la hora de automatizar tareas mecánicas y enfocar el valor humano en otras más intelectuales, mientras que la diferenciación dentro de los sectores o la gestión del miedo son algunos de los retos.
